Fantasmas en los túneles de Gibraltar
En este post os voy a hablar de un lugar lleno de historia y misterios.
Muchas personas son las que cuentan haber vivido experiencias insólitas en este sitio.
Pero vamos a empezar por un poco de historia.
El peñón de Gibraltar es un macizo rocoso de la época jurásica y también conocido como una de las Columnas de Hércules.
Gibraltar es una colonia británica con una extensión aproximadamente de 6,8 kilómetros cuadrados. Pero en su interior alberga unos 55 kilómetros de túneles, llenos de historias que muchas de ellas nunca saldrán a la luz.
Los construyeron los británicos, comenzaron haciendo 2,4 kilómetros en el 1782 durante el periodo del Gran Asedio y más tarde en la Segunda Guerra Mundial hicieron la mayor parte de los túneles para protegerse de los ataques alemanes.
Construyeron un refugio subterráneo, robusto y grande, capaz de albergar a 16.000 soldados. Excavaron las dependencias necesarias para la subsistencia de las tropas durante 16 meses.
Había: hospital, panadería, potabilizadora de agua, central eléctrica, almacén de armas, taller para reparar vehículos y pasadizos, incluso tienda de alimentos congelados.
A nivel histórico podemos pasar un buen rato recopilando información, pero para no alargar mucho el post voy a centrarme en los datos que tengo relacionado con los sucesos paranormales que cuentan sobre este lugar.
Hay algunas partes de estos túneles que se pueden visitar, pero la gran parte de ellos no se puede tener acceso si no es con un permiso de las autoridades del Peñón. También me han dicho que hay zonas que es imposible visitar, ya que tienen acceso restringido.
Por el momento solo he conseguido entrar en la parte turística que se puede acceder en la visita a la reserva natural, pero sigo intentando conseguir permisos para acceder a las partes cerradas al público.
Personalmente no he tenido ninguna experiencia paranormal en este lugar, aunque si se nota que hay presencias de energías al realizar el recorrido.
Lo que llevo muchos años es recopilando historias de personas que si las han vivido experiencias extrañas, he conseguido mantener entrevistas con trabajadores de los túneles y con vecinos de allí que saben casos que se comentan de boca en boca.
Los fenómenos más comunes son las voces, ver siluetas pasar por los largos túneles, dicen que muchos trabajadores han oído cómo silbar y cantar.
Incluso en una página de turismo de Gibraltar (https://www.visitgibraltar.gi/) recogen algunas historias como la del suboficial retirado Peter Jackson. Que contó que un día llevó a la hija del soldado Lawrence Bolton a poner flores en el lugar donde este había muerto en un accidente en el túnel. A los pocos días regresó al lugar y una fuerza invisible le tiró y sacudió de su camisa. Afirma que al salir del túnel una mujer que él no había visto nunca, le dijo que había sido el fantasma de Bolton.
Hay muchos habitantes de Gibraltar que conocen historias similares con soldados fallecidos como protagonistas.
Es muy normal que todavía pueda quedar en aquel lugar algún ser que no ha encontrado su camino después de tantos años.
Allí murieron decenas de soldados por múltiples motivos, heridas, enfermedades y accidentes incluso hubo más de un suicidio. Muchos de esos hombres perdieron sus nombres en el olvido, como los de tantas víctimas de las guerras y quizás siguen deambulando por allí a la espera de que alguien recuerde su historia.
Gibraltar es una colonia británica con una extensión aproximadamente de 6,8 kilómetros cuadrados. Pero en su interior alberga unos 55 kilómetros de túneles, llenos de historias que muchas de ellas nunca saldrán a la luz.
Los construyeron los británicos, comenzaron haciendo 2,4 kilómetros en el 1782 durante el periodo del Gran Asedio y más tarde en la Segunda Guerra Mundial hicieron la mayor parte de los túneles para protegerse de los ataques alemanes.
Construyeron un refugio subterráneo, robusto y grande, capaz de albergar a 16.000 soldados. Excavaron las dependencias necesarias para la subsistencia de las tropas durante 16 meses.
Había: hospital, panadería, potabilizadora de agua, central eléctrica, almacén de armas, taller para reparar vehículos y pasadizos, incluso tienda de alimentos congelados.
A nivel histórico podemos pasar un buen rato recopilando información, pero para no alargar mucho el post voy a centrarme en los datos que tengo relacionado con los sucesos paranormales que cuentan sobre este lugar.
Hay algunas partes de estos túneles que se pueden visitar, pero la gran parte de ellos no se puede tener acceso si no es con un permiso de las autoridades del Peñón. También me han dicho que hay zonas que es imposible visitar, ya que tienen acceso restringido.
Por el momento solo he conseguido entrar en la parte turística que se puede acceder en la visita a la reserva natural, pero sigo intentando conseguir permisos para acceder a las partes cerradas al público.
Personalmente no he tenido ninguna experiencia paranormal en este lugar, aunque si se nota que hay presencias de energías al realizar el recorrido.
Lo que llevo muchos años es recopilando historias de personas que si las han vivido experiencias extrañas, he conseguido mantener entrevistas con trabajadores de los túneles y con vecinos de allí que saben casos que se comentan de boca en boca.
Los fenómenos más comunes son las voces, ver siluetas pasar por los largos túneles, dicen que muchos trabajadores han oído cómo silbar y cantar.
Incluso en una página de turismo de Gibraltar (https://www.visitgibraltar.gi/) recogen algunas historias como la del suboficial retirado Peter Jackson. Que contó que un día llevó a la hija del soldado Lawrence Bolton a poner flores en el lugar donde este había muerto en un accidente en el túnel. A los pocos días regresó al lugar y una fuerza invisible le tiró y sacudió de su camisa. Afirma que al salir del túnel una mujer que él no había visto nunca, le dijo que había sido el fantasma de Bolton.
Hay muchos habitantes de Gibraltar que conocen historias similares con soldados fallecidos como protagonistas.
Es muy normal que todavía pueda quedar en aquel lugar algún ser que no ha encontrado su camino después de tantos años.
Allí murieron decenas de soldados por múltiples motivos, heridas, enfermedades y accidentes incluso hubo más de un suicidio. Muchos de esos hombres perdieron sus nombres en el olvido, como los de tantas víctimas de las guerras y quizás siguen deambulando por allí a la espera de que alguien recuerde su historia.
Mientras tanto yo sigo con mi intención de algún día poder hacer una investigación en la parte que esta cerrada al público, voy guardando datos, pero hasta entonces os dejo este pequeño adelanto.
Hasta el próximo post💀💋
Fotos
